Contenidos
Cuando llega un nuevo cachorro , es probable que se concentre en ayudarlo a sentirse como en casa con su familia en lugar de cualquier problema de salud que pueda tener el perro.
Pero un cachorro en crecimiento puede correr el riesgo de sufrir trastornos del desarrollo como la panosteitis, que puede ser muy dolorosa.
Afortunadamente, al conocer los factores de riesgo y los primeros signos de problemas de salud relacionados con el crecimiento, como la panosteitis, puede tomar medidas simples para prevenir la afección y mantener saludable a su cachorro en crecimiento.
¿Qué es la Panosteitis?
La panosteitis es un trastorno doloroso del desarrollo que ocurre en cachorros de razas grandes , jóvenes y de rápido crecimiento .
Los cachorros afectados pueden experimentar dolores musculoesqueléticos crecientes y menguantes, no muy diferentes a los dolores de crecimiento que sentimos los humanos.
La panosteitis es también conocida como osteodistrofia fibrosa o enostosis, y es una enfermedad de etiología desconocida que causa cojera con dolor intenso.
Aparece de manera repentina sin antecedentes traumáticos pero es probable que la enfermedad también tenga un componente hereditario, ya que algunas razas se ven afectadas con mucha más frecuencia que otras.
Factores de Riesgo
Cualquier cachorro de raza grande o gigante puede desarrollar panosteitis, pero los pastores alemanes constituyen la gran mayoría de los casos.
La panosteitis es más predominante en los machos que en las hembras y tiene mayor incidencia entre los 6-15 meses de edad, aunque se puede manifestar desde los 2 meses hasta, excepcionalmente, los 4 años.
Otras razas altamente susceptibles son cualquiera de raza grande o gigante como:
- Golden Retriever
- Gran Danés
- Doberman
- …….etc…
Y como hemos mencionado anteriormente, es probable que la enfermedad también tenga un componente hereditario.
Una vez que un perro desarrolla panosteitis, los episodios de dolor y cojera pueden continuar de manera intermitente hasta que el perro tenga 1 o 2 años.
Los brotes ocasionalmente también ocurren en perros adultos, a veces denominados “reciclaje” de panosteitis.
Síntomas
El síntoma más común es una cojera súbita con intensidad variable, normalmente en los miembros anteriores, y sin antecedentes traumáticos.
La cojera puede ser intermitente y migrar a otros miembros de forma aguda durante su evolución, convirtiéndose con el paso del tiempo en cojera de curso crónico.
La cojera puede ser de dos tipos: sin apoyo o de arrastre.
El animal con esta afección podrá mostrar rechazo para caminar, saltar, correr o realizar cualquier ejercicio.
En casos de panosteitis severa, el perro también presentará otros signos como fiebre, depresión, letargo, anorexia o pérdida de peso.
Si la afección no se trata adecuadamente y a tiempo, podrá también experimentar atrofia muscular.
- Cojera de inicio repentino en una o más extremidades
- Cojera que cambia entre las extremidades
- Dolor intenso, especialmente cuando se palpan las extremidades afectadas
- Falta de voluntad para levantarse (severa)
- Pérdida de apetito (severa)
- Vocalización excesiva (severa)
- Fiebre (severa)
Tratamiento
Lamentablemente no existe cura para la panosteitis y el tratamiento se centra en aliviar el dolor mientras la enfermedad sigue su curso.
Su veterinario puede recomendarle que comience con un medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINE) para disminuir el dolor y la inflamación durante los brotes de panosteitis.
Prevención
Algunos perros responden mejor a un AINE que a otro, por lo que puede ser necesario un poco de prueba y error para encontrar el medicamento adecuado.
El cachorro afectado debe descansar y evitar actividades extenuantes durante estos episodios.
Es posible que también deba hacer la transición de su perro a una nueva dieta para ayudar a prevenir más problemas.
Recuerde de elegir la mejor dieta para la edad y la raza de su cachorro.
En caso de sobrepeso, desarrollar un plan de pérdida de peso gradual puede reducir el estrés en las extremidades doloridas y prevenir futuros problemas ortopédicos.
La buena noticia es que la mayoría de los casos de panosteitis eventualmente se resolverán por sí solos.
Algunos se pueden resuelver en tan solo dos o tres semanas, mientras que otros pueden continuar experimentando brotes intermitentes hasta que el cachorro alcance la madurez esquelética.
Prevención
La prevención de la panosteitis se consigue cuidando la alimentación del cachorro.
Los perros de razas grandes y gigantes deben tener una dieta que no les proporcione un exceso de calcio.
Es de vital importancia vigilar la dieta de estas razas para controlar su correcto crecimiento, aportándoles concentraciones más bajas de proteínas y grasas que en otras.
Existen alimentos preparados para cachorros y adultos de este tipo de razas con los nutrientes especialmente calculados para que tengan un crecimiento adecuado,específico para cachorros de entre 2-12 meses de edad que pesarán en su edad adulta más de 30 Kg.
En general, e independientemente del tamaño de la raza, es importante vigilar la cantidad de alimento para mantener al perro en un peso corporal saludable sea cual sea su edad.
Si te ha gustado este post sobre la Panosteitis déjanos un comentario o comparte en tus redes